miércoles, 13 de junio de 2012

HEREDEROS


HEREDEROS

-¿Nada Josefa?
Nada Dianora, el viejo aun esta con vida,
-Le dijiste a los muchachos?
-Hay que esperar
-Van cincuenta años Josefa.
Bueno dispón del tiempo necesario;  te  veo por la mañana, voy ir de pesca al  San José.,
La casa amaneció llena de nietos que corrían por todas partes, había llegado la familia excepto su hijo Marcelo.
-Como siempre ocurre, ni siquiera en la tragedia se acuerda de visitarnos.
La casa parecía un hotel de caridad, se acomodaron  en todas partes había hamacas colgadas en todo los rincones, el bullicio de los niños era desesperante.
Los observaba en silencio, mientras las mujeres atendían a los suyos, en la cocina, el baño y los dormitorios. Los hombres sentados debajo de un árbol, jugaban cartas y dominó.
Entró al cuarto donde yacía el moribundo quien abrió los ojos en el instante, y dijo- Josefa, apenas muera  trae al abogado y reparte la herencia, por eso están aquí. Al único que le importamos es a Marcelo. Siento que mi hora ha llegado. Vete donde Dianora y regresa mañana. Sé que harán un circo con mi muerte. Espera que transcurran nueve días y entonces les cuentas la verdad.
Lo que tú digas Prudencio. Le dio un abrazo y un beso en la frente y se marchó a escondidas.
Lo enterraron al siguiente día  a lado de su primera esposa. Cuando todos se fueron, llegó acompañada de Dianora y le quitó las flores a la tumba, como él lo había pedido. Debe estar feliz con ella, espero que sí, dijo Josefa nunca pudo olvidarla.
Después de las nueve noches,  Josefa reunió a la familia, y les dijo que los había invitado para resolver los asuntos legales.
 Aquí están los documentos con la herencia correspondiente de acuerdo al testamento de Prudenció. Espero que cada uno realice la vida que fue incapaz de hacer, y  me dejen en paz. Estoy cansada  de sus peleas e insultos, o mejor de sus picotazos porque parecen buitres.
 Sé que me odian, me acusan de haberles quitado la oportunidad de crecer al lado de sus padres;  aseguran que Prudencio dejó a su difunta esposa, para venirse conmigo; les aparece imperdonable  el criar a mi hijo  Marcelo, en vez de ustedes que eran los propios. En parte tienen razón, aunque lo que hizo el viejo mientras pudo,  fue mandarles dinero para ayudarles a cumplir sus sueños, hasta quedar en la ruina y al final, ninguno hizo algo que valiera la pena.
Durante años se alejaron, nunca le dieron un presente de cumpleaños. El sueño de ser abuelo se frustró.  nunca trajeron los nietos a compartir una velada, ni lo invitaron a conocer sus hogares. Sin embargo llenan de flores su tumba.
Ese hombre maravilloso mantuvo a cinco holgazanes hasta llegar a ser mayores de edad, a pesar que ninguno fue su hijo. Quedaron sorprendidos.
-Explícate. dijo el mayor.
En este dictamen médico consta que prudenció era estéril. El dijo que su esposa lo sabía y que entre los dos habían acordado para criarlos, con la condición proceder de padres distintos, por temor a que ella se enamora de alguien. Después,  se alejó de ella al desear otros dos hijos. Ustedes  son siete, cinco que registro Prudencio y dos de padres distintos.
Esta es la relación de los bienes  existentes. Aquí hay un listado donde aparecen sus respectivos progenitores, ustedes verán que hacen con ellos. Yo, a los setenta años por fin voy a cumplir mis sueños. El vivió conmigo todo estos años, a pesar de saber  que tengo otras preferencias. Señoras y señores les presento mi pareja, se llama Dianora y llevamos cincuenta años de estar juntas en la clandestinidad. A partir de hoy compartiremos los últimos años de vida. Les deseo que sean  felices, nosotras haremos lo mismo. Uno por uno recogió sus cosas, y en las canoas se alejaron   por el rio.
- por qué hiciste eso? dijo Dianora entre risas, eres bien mala, Prudencio debe estar que se levanta de la tumba.. ¿De dónde sacaste ese papel?
Lo envió Marcelo, se lo hizo un amigo.
¿Y si ahora van buscar a esos señores?
Que lo hagan,   los de la lista están muertos apenas pueda desentierro al difunto y lo tiró al rio. Ahora van a quedar con la tristeza de ser hijos de padre desconocido.

-Dianora, ¿ya contaste a tu familia nuestro secreto?
Que se enteren solos se que Pasaran días para notar mi ausencia.